Ferro comenzó el torneo con la vara alta después de lo que fue el ciclo de Gómez–Orsi que terminó tras aquella noche de terror en Quilmes. Para el 2022 se decidió apostar por Manuel Fernández, técnico de último paso por Agropecuario que terminó el torneo (quinto en la zona A) a las puertas del reducido. La idea del entrenador es muy distinta a la de los anteriores y también muy cuestionada. A pesar de haber conservado 7 de los 11 titulares del campeonato anterior, el técnico busca algo tan opuesto a lo que finalizó en diciembre, que la diferencia se hace visiblemente mala en la comparación inmediata.
En el inicio del torneo Ferro debutó ante Nueva Chicago en Mataderos que había terminado último en la zona A. En el desarrollo inicial se vieron repetida cantidad de errores en las salidas del fondo con la pelota (un recurso repetido y mal ejecutado) y el verde solo tuvo una sola recién a los 41 del primer tiempo. En el complemento, casi a los 10 minutos, de un córner para Ferro, surge el único gol del encuentro con un cabezazo de Nahuel Arena. Aunque se percibieron algunas mejoras se sufrió más por las impericias propias que por el peligro generado por el rival.
La segunda fecha significó el regreso a Caballito recibiendo a Deportivo Maipú. Fue un partido muy malo para Ferro (no puedo decir que fue el peor que vi de Oeste por que vi varios malos, pero seguro que está entre los peores) otra vez se repitieron las malas salidas desde el fondo y se mostró sin ideas de juego. En el segundo tiempo, en el minuto 53, llegó el gol de la visita para sentenciar el 1 a 0 y llevarse la Copa Aniversario de Caballito… Solo una situación de gol tuvo Ferro en todo el partido, lo que significó un retroceso en un funcionamiento que ya había sido malo.
En la fecha tres tocaba volver al estadio donde fue el robo de Lamolina… El Centenario de Quilmes fue testigo nuevamente de otro arbitraje polémico. En un partido que arrancó con un grosero error de Sosa al minuto y medio de juego que terminó en gol para Quilmes, Ferro seguía cometiendo los mismos errores de los partidos anteriores y la falta de creación de situaciones de gol. En la segunda mitad, después de varias llegadas del local y muy buenas atajadas de Miño que evitó que el resultado sea peor, llega un córner para el verde que pega en la mano de un defensor local que el árbitro sancionó penal y que Enzo Diaz cambió por gol. El técnico Fernández realizó varios cambios (con jugadores del club incluido y el debut de Lucas Roman categoria 2004) y el equipo tuvo algunas mejoras. Cuando parecía que terminaba en empate, en tiempo adicional el árbitro cobró un penal para Quilmes que solo él vio (una supuesta mano) que en la televisación claramente se ve que pega en el pecho de Sosa. El resultado terminó siendo 2 a 1 a favor del local y el verde se volvió a Caballito lleno de dudas.
Por la fecha cuatro el verde recibió a Independiente Rivadavia en un partido que parecía que podría ser distinto, ya que Ferro tuvo unos 10 minutos de presión, pero después se fueron consumiendo y fue lo mismo de los partidos anteriores: pases mal hechos, poco control y sin generar situaciones de gol. El final fue 0 a 0 con sabor a derrota.
Como balance general se puede decir que la idea del entrenador hasta ahora no se ve en la cancha y la falta de juego para generar situaciones de gol está muy a la vista. En estos cuatro partidos Ferro solo tuvo cinco situaciones claras de gol, esperemos que en este parate por fecha libre podamos ver una mejor imagen del equipo. La paciencia parece estar al límite. Ahora habrá 15 días para lograr mejoras que no se lograron en 2 meses, recuperar a jugadores que vienen con problemas físicos y traer al reemplazante del “turbo” Rodríguez. Ya no habrá más tiempo ni excusas.
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